domingo, 24 de agosto de 2014

A VUELTAS CON EL YIN Y EL YANG

Empecemos.
Yin y Yang son los opuestos complementarios representados en el famoso símbolo que tanto anda por ahi, con su blanco y negro en su forma más clásica y ya con representaciones más innovadoras en imágenes más modernas.
El caso es que describir lo que es suele pasar por:
Yin: femenino, frío, abajo... etc
Yang: masculino, caliente, arriba... etc.
Me quedo con estos porque me van a servir para dar un paso más.
Solemos separarlos de forma radical; si es negro no es blanco; si está frío no está caliente y así.
Pero resulta que en realidad es un arcoíris de posiblilidades que quizá sean infinitas.
Algo que está arriba, yang, hasta que llega abajo, yin, pasa por una serie de estados intermedios que no son ni una cosa ni la otra. Y viceversa.
El agua fría, yin, para llegar a estar caliente, yang, pasa por estados templados que la van alejando de un estado y acercando a otro. Y viceversa.
Lo femenino, yin, es capaz de engendrar un yang; y un yang tiene una parte yin que posibilita que otra lo engendre. Sí, un yang no puede traer al mundo ni uno ni otro, pero es un complemento imprescindible para que yin se realice en su papel generador. Y al revés, un yang necesita una yin en ese mismo papel.
No hay absolutos; es un continuo movimiento que genera al otro, por eso ese símbolo no parte el blanco y negro a la mitad. La parte más yin se junta con el inicio de la yang. Al mismo tiempo cada uno de ellos tiene parte del otro, de ahí el círculo blanco en el negro y el negro en el blanco.
En la vida, es igual. Buscamos absolutos poque parece que nos dan más seguridad: en creencias, en el trabajo, en casa...; pero el verdadero equilibrio está en entender que todo es cíclico, mutable, colorido y que el quedarse bloqueado en un extremo es lo que realmente genera la inseguridad. Un ejemplo:  la puntualidad; ser inflexible en ese punto puede generar ansiedad en otro; ser demasiado flexible hace que te tomen por el pito del sereno.

Ambos, el lado femenino y el masculino son necesarios y eso lo saben los orientales y lo sabían los occidentales (digo sabían porque por acá somos ahora bastante cuadriculados). Otro ejemplo: la Sala Capitular del Monasterio de OSEIRA, esa con las columnas que parece que tienen vida, tiene un medallón en su parte central en el que hay la imagen de un hombre y una mujer; dos caras, cada una mirando para un lado pero unidas; son la representación del equilibrio, del absoluto, de la perfección. La unión de ambas sin que una resalte sobre la otra, es un juego de búsqueda: el centro, donde yin y yang no son ni yin ni yang.
Dicho en cristiano de la tierra: "nin tanto aquí nin tanto alá, no medio e medio". Pero teniendo claro que el quedarse en el medio siempre es imposible, por lo menos para los humanos normales, por eso la búsqueda en constante.

La foto de la Sala Capitular es de un fotógrafo que me encanta: XOAN ARCO DA VELLA


martes, 19 de agosto de 2014

V ANDAINA POLO TAICHI

El día posterior al Apóstol hicimos la V ANDAINA, que para ser realmente precisa tendría que decir que comenzó el día anterior y terminó al día siguiente.
Fueron tres días en que pudimos disfrutar de la presencia del M. Mariano, con lo que en realidad fue como uno de esos seminarios que parece que no existen porque no hacen ruído, pero que te amplian el alma al vivirlos. Y más cuando alguien te presta su casa para que no se pierda el continuo que genera. Ese alguien es mi querida Luisa; una mujer de las especiales de verdad que suman con todo lo que hacen y dicen.
La ANDAINA propiamente dicha consistió en el último tramo del CAMINO PORTUGUÉS, que será el que realicemos con el G. M. Liming Yue el próximo mes de mayo; aunque con alguna variante, que para eso hicimos esta ruta: para comprobar lo que nos gustaba y lo que no.
TAICHI, entendido como camino, lo hicimos durante toda la ruta y los otros dos días.
TAICHI como estímulo de la mente, tras la comida, en las pausas, en las charlas...
TAICHI como forma,  tuvo su momento especial en plena PLAZA DO OBRADOIRO; de las experiencias más vivas que se pueden tener, porque esa plaza es mágica. El WUDANG como protagonista, mezclándose con la gente, cada una a lo suyo, sin molestarnos ni resaltar; integrados, como debe ser todo en esta vida.
Todos estos TAICHI son los que después uno se lleva a su casa porque ayudan y nutren, para al final quedarte con tu esencia, que es lo que importa.
Esa plaza, ese día, tuvo otro momento mágico y emotivo: ver el nacimiento de MATREN TAICHI.
MATREM TAICHI está en un libro, que es sólo una pequeña parte de lo que es realmente. Es un libro para jugar porque jugar es una forma de crecer; y eso fue lo que hicimos con él en esa plaza: ahí comenzó el juego. 
Por la noche tuvimos una cena, en la que no podía faltar el discurso de mi querida Sonia, que siempre me ha acompañado en los momentos importantes de mi vida, esos que sabes cuando empiezan pero no cuando terminan porque hay que dejar que vayan madurando. Y nosotras con ellos.
Me estoy quedando mucho en lo externo de esos tres días; quizá algún día cuente la esencia, no sólo de esta experiencia, sino de otras muchas que me acompañan en esta etapa de mi vida, pero no es el momento, porque yo estoy en pleno juego y aún no sé como expresarlo. 
Sólo un enorme GRACIAS a tod@s.